Normalmente no suelo hablar de niveles concretos en ningún mercado, ya que lo que suele interesarme son los eventos y las tendencias macroeconómicas y financieras, tendencias y eventos que pueden comenzar y finalizar en cualquier nivel.

Sin embargo, de vez en cuando hay niveles que por varios motivos confluyentes se vuelven absolutamente claves para el mercado. Y creo que los 4200 puntos del S&P 500 es una de esa ocasiones especiales.

Hace un mes avisé aquí en el Club que la amplitud se había vuelto negativa, un evento que cuando menos requería y requiere vigilancia y cautela (por ejemplo, en mis inversiones personales decidí deshacerme de todo apalancamiento). Desde entonces las cosas no han mejorado y la amplitud sigue en ese terreno de cautela. (Nota: en este otro artículo expliqué la importancia de este concepto de la amplitud).

Amplitud de mercado (acumulado nuevo máximos - nuevos mínimos). No todo cruce a la baja acaba en mercado bajista, pero todo mercado bajista comienza con un cruce a la baja. Fuente.

Después de semanas declinando casi sin pausa desde principios del mes de agosto, la amplitud de mercado parece estar estabilizándose en los últimos días. Como se puede observar en el siguiente gráfico del índice Value Line Geometric Index, el rebote se produce desde el rango bajo (excluyendo el mínimo de octubre de 2022) del gran lateral en el que ha cotizado la amplitud de mercado durante los últimos 18 meses.

El índice Value Line Geometric Index es otra forma de medir la amplitud. En los últimos días está estabilizándose y lo hace desde una zona que empieza a diferenciar escenarios. Fuente.

Si tras el rebote actual el siguiente movimiento es romper a la baja dicho lateral, ello probablemente estaría indicando que la amplitud de mercado ha entrado en barrena, lo cual es una señal negativa para el conjunto del mercado.

Y por correlaciones de las últimas semanas, romper a la baja esa zona de soporte corresponde con los 4200 puntos del S&P 500, nivel desde el que aproximadamente se ha producido el último rebote desde principios de este mes de octubre. Nivel que además es donde se encuentra la popular y muy seguida media de 200 sesiones, que para muchos, si se rompe a la baja de forma sostenida, es el nivel que separa un mercado alcista de uno bajista. Aquí la clave es que la media de 200 no es como cualquier otra media, ya que esencialmente es seguida por todo el mundo y por eso se vuelve tan relevante. Por debajo o por encima puede hacer la virar la opinión de multitudes.

Y es que además, como tercer factor técnico, ese nivel de los 4200 puntos del S&P 500 es un nivel que aproximadamente fue la zona de resistencia durante la segunda mitad de 2002 y primera mitad de 2023, con lo cual ahora potencialmente es una zona de soporte. Mientras lo mantenga, estará siguiendo un esquema alcista, pero un soporte violado a la baja sería una circunstancia técnica muy negativa.

Antigua residencia ahora es zona de soporte. La media de 200 sesiones separa dos escenario.

Con todo ello, este nivel de los 4200 es la confluencia de múltiples observaciones técnicas. Pero es que también confluye otro factor clave del sentimiento de mercado. A principios de este mes de octubre el ratio put/call se elevó con energía sobre 1,4, indicando que en esos niveles muchos operadores comenzaron a buscar cobertura en caso de más caídas del mercado.

Ratio Put/Call en panel inferior y S&P 500 en panel superior. Fuente.

Típicamente cuando el ratio put/call se dispara mostrando un repunte repentino de la incertidumbre, el mercado suele estabilizarse en las siguientes sesiones y tras esa estabilización comienzan las subidas.

Ahora bien, si se está en un mercado alcista, ese suele ser un mínimo relevante que no se volverá a romper a la baja, ya que por definición puntos de extremo pesimismo en un mercado alcista son excelentes oportunidades de compra (o de "no venta").

Pero si ese intento de estabilización vuelve a perderse tras producirse un rebote "de alivio", entonces nos estaría señalando una extrema debilidad del mercado. Es decir, estaría mostrando el comportamiento típico de un mercado bajista, uno en el que ni los puntos de extremo pesimismo de corto plazo "son respetados".

De hecho, si bien los argumentos técnicos de amplitud, media de 200 y soportes/resistencias son relevantes, en mi opinión los puntos de extremo pesimismo de corto plazo son aún más significativos a la hora de determinar niveles clave en el mercado. Es decir, le doy incluso más importancia que a los tres primeros juntos.

Ahora bien, es importante entender que en este nivel de los 4200 puntos, si se vuelve a tocar en las próximas semanas, va a existir mucho ruido y una lucha encarnizada entre alcistas y bajistas. Pero filtrando el ruido de corto plazo, la resolución que tome el mercado para mí será una resolución a respetar.

O dicho de otra manera: sigo siendo alcista por los factores relatados a finales de noviembre de 2022, pero desde principios de octubre soy un alcista cauteloso -por la amplitud- y si se pierden los 4200 puntos de forma sostenida, entonces simplemente pasaré a tener una postura neutra dejando de ser alcista y quedándome a la espera de nuevos acontecimientos.

Normalmente no son los factores técnicos los que exclusivamente me llevan a tomar una postura u otra, pero hay ocasiones especiales en las que un nivel técnico se vuelve muy relevante. Y en mi opinión este es uno de ellos.

Otro factor técnico, o quizás simplemente observación técnica más que factor en sí mismo, es que típicamente la media de 20 meses suele dividir muy bien lo que son los mercados alcistas de los mercados bajistas. Ya en febrero de este año hablé de los 4200 puntos y de esta media de 20 meses como algo a observar. Pues ahora también lo es, porque aproximadamente los cuatro factores anteriores nombrados coinciden muy de cerca por donde está pasando esta media de 20 meses (4.137 puntos)

S&P 500 en velas mensuales y momentos de cruce al alza y a la baja de la media de 20 meses.

Desde mi punto de vista, lo que está ocurriendo desde agosto no es que el mercado esté declinando por malas noticias macroeconómicas, sino por lo contrario, porque los datos que están saliendo hablan de que la economía está resistiendo (un régimen donde buenas noticias económicas = malas noticas para el mercado).

Esto hace que el mercado acepte que los tipos de interés de largo plazo estarán elevados por más tiempo del esperado previamente, haciendo que el precio de los bonos decline -precio y rentabilidades se mueven de forma inversa-.

Con esa subida de los tipos de interés, el mercado de acciones tiende a caer, al menos en el corto plazo, ya que cuando el precio del dinero se vuelve más caro, el precio de otros activos como las acciones se reduce (reajuste de valoración por aumento de la tasa de descuento).

ETF "TLT" de bonos soberanos de EEUU de largo plazo. Fuente.

Aunque este régimen de mercado donde las buenas noticias son malas para los mercados típicamente no provocan mercados bajistas, ya que al fin y al cabo la economía sigue creciendo, el gran riesgo aquí es que uno de estos días el mercado de acciones no solo caiga porque los tipos de interés suben, sino que llegue un punto en el que los tipos de interés "le parezcan imposiblemente altos" y el mercado de acciones entre en pánico.

Este último párrafo lo he expresado de forma deliberadamente indeterminada, porque cómo y cuándo reaccionará el mercado de una manera u otra, es como intentar saber cuándo una persona entraré en pánico o no. Es imposible. Pero lo que sí creo saber es que los 4.200 puntos son una buena frontera que divide dos escenarios muy diferentes, por los argumentos de mercado expresados. En especial por el extremo de pesimismo alcanzado recientemente, que debería respetarse si efectivamente seguimos en un mercado alcista.

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